«Storie Alfa Romeo», décimo episodio - Giulia y Stelvio representan 110 años de excelencia italiana
Alfa Romeo regresa a Nürburgring
Imagínese allí en uno de esos días en que el cielo sobre el trazado Nordschleife parece un imponente telón de fondo. Nubes espectaculares se elevan por encima de los bosques que rodean el circuito. El aire es fresco y seco... ideal para el piloto que está detrás del volante. Dos meses después de su presentación, el Giulia Quadrifoglio está llamado a dominar un circuito que a lo largo de los años ha sido testigo de muchas victorias de Alfa Romeo: el «Grüne Hölle» o «Infierno verde» de Nürburgring.
Al parecer, este siniestro apodo fue inventado por Sir Jackie Stewart en la década de los sesenta y con razón: este es un circuito que podría haber sido diseñado por el mismísimo diablo... más de 70 curvas alternadas con rectas y subidas y bajadas con 300 metros de diferencia de altitud.
En la zona de salida, el Giulia Quadrifoglio está listo. No se ha preparado al efecto, no está equipado con neumáticos «lisos» y tampoco tiene barra antivuelco: parece exactamente el coche que cualquiera podría comprar. Si no fuera por el casco, incluso el piloto, vestido con vaqueros y un polo, parecería un conductor normal. No hay luces verdes para la salida, ni una bandera a cuadros esperando al final de la vuelta, pero los niveles de adrenalina difícilmente podrían ser más altos: hay un récord que batir.